Una gerente de confitería y jugadora de hockey profesará como monja
contemplativa en las Clarisas de El Toboso
Se trata de la hermana Blanca Lila y emitirá su profesión solemne el próximo sábado, 21 de noviembre, acompañada por sus padres, familiares y amigos en una ceremonia que tendrá lugar a las 12:00 horas del mediodía en el Convento de Clarisas de El Toboso (Toledo).
EL TOBOSO / 16 NOV ■ InfoParroquia.- La Fraternidad de Hermanas
Pobres de Santa Clara del Convento de la Concepción y San Benito de El Toboso
(Toledo), vivirá el próximo sábado, 21 de noviembre, una de las jornadas más
emotivas y brillantes que se da en la vida de un monasterio de clausura, la
profesión solemne de una de sus religiosas. En concentro, la de la hermana Blanca
Lila Ruiz Díaz Ros, natural de Asunción (Paraguay) pero que desde hace seis
años viene preparando este momento tan importante en la Patria de Dulcinea.
La hermana Blanca Lila de Jesús y del Inmaculado
Corazón de María, que así es como se la nombra religiosamente, cuenta con 49
años y además de tener grandes dotes para la repostería monacal por la que es
famoso el convento toboseño, es sin duda una gran mujer que vocacionalmente está decidida
a «asumir el firme propósito de observar el santo Evangelio y de seguir e
imitar la vida del altísimo Señor Nuestro Jesucristo y de su Madre; también de
prometer y hacer voto a Dios omnipotente de vivir todo el tiempo de mi vida en
castidad, sin propio, en obediencia y en clausura, según la Regla de las
Hermanas Pobres de Santa Clara», como reza la fórmula de profesión que este sábado próximo pronunciarán sus labios en el transcurso de una Misa a la que
asistirán sus padres y familiares, venidos desde Paraguay.
La ceremonia que se iniciará a las 12:00 horas del mediodía
en la Iglesia del Convento de las Clarisas de El Toboso, estará presidida por
el P. Fr. Juan Pedro Ortega
Torrero, O.F.M, y concelebrada por un nutrido grupo de sacerdotes
amigos de la comunidad, entre ellos el capellán del monasterio y párroco de la
localidad, Rvdo. D. Juan Miguel Romeralo Santiago. La parte musical
de la celebración correrá a cargo de un coro formado por hermanas clarisas de
otros conventos próximos a El Toboso y que este día acompañarán a la hermana Blanca
Lila.
Si desean saber más sobre la hermana Blanca Lila y la
Comunidad de Hermanas Clarisas de El Toboso le invitamos a leer las siguientes
entradas en nuestro blog:
Con motivo de la celebración de la Jornada Mundial de
la Vida Consagrada, día 2 de febrero, InfoParroquia EL TOBOSO entrevista a la
Hermana Blanca Lila, del convento de Clarisas. Y es que en El Toboso, desde el
año 1997, los dos conventos de clausura celebran esta jornada eclesial para dar
a conocer su modo carismático de vivir el seguimiento de Cristo e invitan a
todos los fieles a dar gracias a Dios por el don de la vida consagrada hoy [...]
De los tres conventos que en su larga historia ha
tenido El Toboso, el de la Concepción y San Benito, hoy fraternidad de Hermanas
Clarisas, es el primero y más antiguo de todos con cinco siglos de vida y que a
día de hoy, continua con la presencia de una comunidad formada por nueve
hermanas entre las que destacan la vitalidad de tres jóvenes religiosas [...]
Así son y viven este puñado de nueve hermanas, de
edades y procedencias muy distintas, que forman una comunidad religiosa
contemplativa en la Patria de Dulcinea. Famosas por sus dulces y pastas, entre
ellas las “pelusas”, nos cuentan detalles de su día a día, su trabajo, el
sustento del convento y la razón de por qué están ahí y para qué […]
Biografía
La hermana Blanca Lila Ruiz Díaz Ros nació
un 21 de marzo de 1966, en Asunción (Paraguay). Melliza con Blanca Rosa, ocupa
el segundo lugar de cinco hermanos cuyos padres son Pedro Ruiz Díaz Ortega y
Norma Ros Malvertia, ambos dos dedicados a la contaduría y secretaría ejecutiva
y comerciante. Este matrimonio dio todo lo mejor de sí, y lo siguen dando, por
transmitir su cariño, amor, apoyo y la Fe a sus diecisiete nietos actuales. Y
es que la hermana mayor de Blanca Lila, Leda Liz, de profesión doctora
cardiológica, tiene seis hijos; su hermana melliza, Blanca Rosa, de profesión farmacéutica,
es madre de cinco hijos; la tercera hermana, Norma, que es psicóloga, un hijo; y,
por último, el único hermano varón de la familia, Enrique Rubén Darío, de profesión
publicitario, que tiene tres hijos.
Sus estudios primarios los cursó en una
escuela privada, de fundación mejicana, y los secundarios, desde el primer
curso hasta el sexto curso, en el colegio religioso “La Providencia”, lugar
donde además creció su formación cristiana.
Tras su etapa de bachiller, cursó estudios
de química durante tres años en la Universidad Nacional de Asunción (Paraguay),
aunque finalmente terminó especializándose en lo que a ella realmente le
apasiona, el arte culinario, oficio que ejerció durante quince años de los cuales
sus últimos ocho fueron en una renombrada confitería en la capital guaraní en
donde fue gerente antes de llegar a El Toboso (Toledo) e ingresar en el
convento de Hermanas Clarisas.
Recibió el Santo Bautismo el 1 julio de
1966 en la parroquia de San José. Su Primera Comunión, a los 12 años de edad, y
la Confirmación, a los 20, tuvieron lugar en la Parroquia de San Rafael. En
este tiempo entró a formar parte de la primera comunidad del camino
neocatecumenal donde colaboró como catequista por unos años de este grupo y,
sobre todo y lo más importante, fue en este itinerario donde nació su vocación
y descubrió la llamada de parte de Dios Altísimo.
Además de la repostería, desde su más
tierna adolescencia y juventud, practicó el hockey sobre césped hasta el punto de
formar parte en la selección de su país, siendo esta etapa muy favorable para ella
puesto que «la alta exigencia y la dura disciplina que exige este deporte hizo
que no cayera fácilmente en otros vicios», nos afirma.
El 17 de julio de 2009 ingresó en el
Monasterio de la Inmaculada Concepción de las Hermanas Clarisas de El Toboso
(Toledo) como aspirante. En ese momento contaba con 43 años. Dos meses después
inició la etapa de postulantado, el 8 de septiembre de ese mismo año. Concluido
este año de prueba que exigen las constituciones, tomó el santo habito el 12 de
septiembre de 2010, comenzando así el tiempo de noviciado que se prolongó
durante tres años y que culminó con la profesión de votos temporales el 23 de
septiembre 2012, ceremonia presidida por el P. Fr. José Álvarez, O.F.M.
Ahora que ha concluido este largo espacio
de tiempo dedicado a un mayor discernimiento profundo, llegó el gran día de dar
un sí definitivo a Dios con la Profesión Solemne.
Agradecimiento
«Entre los múltiples dones que hemos
recibido y diariamente recibimos del que nos da con esplendidez, el Padre de
las Misericordias, mayormente debemos dar gracias al mismo Padre glorioso por
nuestra vocación». Con estas palabras de nuestra Madre Santa Clara, quisiera
agradecer de corazón a cada una de las personas que hicieron posible el que me
introdujese por este camino y senda, nos cuenta la hermana Blanca Lila.
En primer lugar, a mi queridísima
Parroquia de San Rafael y quien fuera su párroco, el P. Alberto Bertoccini, que hace muchos años nos sigue acompañando
desde el cielo. Gratitud a mis catequistas misioneros itinerantes el P. Julio Moro, Cesar Ureña y Elvira Benítez,
los tres españoles. También a todos y cada uno de mis hermanos de comunidad que
con su oración siguieron apoyándome, a mi padre espiritual P. Ramón la Fuente, de Paraguay. Y a una
amiga catequista, Nena Celada. Todo
ellos son personas especialísimas que estuvieron muy implicados en mi vida y
sin duda fueron instrumentos de los que se valió el Señor.
Y por su puesto a mi querida fraternidad
de Hermanas Clarisas que me abrieron sus puertas y me han acompañado durante
estos seis años y medio de discernimiento, pues con su ejemplo, cariño y
paciencia, son «el espejo de cómo guardar y vivir el santo Evangelio de Nuestro
Señor Jesucristo y no apartarnos de la Santa Pobreza con la ayuda de Dios», como
dice Santa Clara.
A los padres Fr. José Álvarez, O.F.M., que me acompañó desde el inicio de mi
postulantado hasta el noviciado, y a Fr.
Juan Pedro Ortega, O.FM., quien me ha acompañado espiritualmente durante
estos tres últimos años para preparar este gran acontecimiento en mi vida.
Agradecer a toda mi familia por su apoyo y
por el gran esfuerzo que han hecho para estar acompañándome en este día de mi
profesión. Sin duda que es una demostración más de su gran amor y cariño que me
brindaron siempre. A mis padres, hermanos, cuñados, sobrinos, tíos y amigos, ¡Dios
los bendiga siempre!
Quisiera recordar, igualmente, a todos mis
queridos compañeros de colegio de La Providencia y amigas de Hockey puesto que
también que se han hecho presente con sus obsequios y oraciones.
Para terminar, quisiera de nuevo apropiarme
de las palabras de nuestra madre Santa Clara para afirmar que «por eso, doblo mis rodillas ante el Padre de
nuestro Señor Jesucristo (Ef 3,14) para que, por los méritos de la
gloriosa Virgen santa María, su Madre, y de nuestro beatísimo padre Francisco
y de todos los santos, el mismo Señor que inició en nosotros la obra buena, nos
dé también el incremento (cf. 1Cor 3,6-7) y la
perseverancia final. Amén»
FOTOS:
©
Hermana Blanca Lila de Jesús y del Inmaculado Corazón de María Ruiz Díaz Ros,
2015
001- 009.- Diversos acontecimientos con su familia, amigos, comunidad, catequistas, etc.